jueves, noviembre 29, 2007

Nanta Cookin


Con el pretexto de celebrar el aniversario del Centro Cultural Coreano en la Argentina, en pocos días más llegará al país "Nanta Cookin'", un espectáculo musical-percusivo que tiene la particularidad de realizarse con utensilios culinarios. "Los instrumentos de la cocina son los protagonistas del show", advierte el director de la puesta Jang Seock Hyoun.PUBLICIDAD"La cocina es una temática en la cual todo el mundo puede captar los mismos conocimientos, por ello consideramos que es el factor más importante e influyente a la hora de presentarnos y convocar al público", sentenció, en diálogo con Reporter, el mismo Jang Seock Hyoun.Acaso por ello el show que se verá los días 28 y 29 de noviembre en el Teatro Avenida -en Avenida de Mayo 1222 de la Ciudad de Buenos Aires- tiene por eslogan "un espectáculo en el cual se derrumban las barreras entre el escenario y el público".Así, en "Nanta Cookin'" los tambores y gongs se combinan con la cultura tradicional coreana en una moderna puesta en escena. Los actores y/o músicos representan la obra en el interior de una cocina, transportando al público hacia un viaje de sensaciones único.Se trata de un show basado en la fuerza de la música, humor e imágenes, con la energía y la velocidad del "samul nori", que reúne ritmos de percusión tradicionales de Corea.
El show que ya fue visto por más de un millón de espectadores en todo el mundo es uno de los más taquilleros de Corea y logró representarse "Off Broadway". Fue en septiembre de 2003 que llegó a la sala "New Victory Theater" situada en la calle 42 en Broadway. La reacción del público fue mejor de la esperada e implicó que tuviera su propia sala, en el teatro Minetta Lane en Mahanttan.Ahora, esta representación no-verbal coreana que se comunica con el público con solo su melodía y ritmo se podrá apreciar en todo su esplendor en la Argentina. El público disfrutará de una conjunción entre tradición y modernidad, a cargo de Kim Gon Ho, Kim Jin Hee, Jung Min Goo, Hwang Yo Han y Lee Won Gu.

Aparentemente, ya no hay mas entradas (tarrrde, siempre tarrrde), pero quizas un llamadito telefonico pueda conseguir algo:Para poder presenciar el espectáculo deberán retirar las entradas que se distribuirán de manera gratuita, en la Sede del Centro Cultural Coreano en América Latina (Av. Coronel Díaz 2884, Ciudad de Buenos Aires), entre el 12 y 16 de noviembre de 14 a 17 hs. las ubicaciones serán entregadas por orden de llegada y deberán dejar el nombre, el Nro. de DNI y un teléfono. Cualquier duda pueden consultar telefónicamente con el Centro Cultural Coreano al 4803-1572 / 3167.

lunes, noviembre 19, 2007

Slow food contra comida chatarra



Placer equilibrado parece ser la difícil misión de este grupo de origen italiano que ya reúne a más de 80 mil adeptos en el globo. Su búsqueda es destacar los valores culturales de la comida de todos los pueblos. En contra del fast food y más allá de las modas y tendencias gastronómicas, ésta mirada de la comida promueve la educación y el buen gusto.

La silueta sencilla de un caracol en su logo lo dice todo: lento pero seguro, todo lo que sea rápido y estándar queda de lado. Slow Food se autodefine como el eslabón entre la ética y el placer. La propuesta, con tintes de ecología y política, promueve rescatar sabores olvidados, proteger la biodiversidad, incentivar la gastronomía y adiestrar los sentidos para disfrutarla.


En pos de sus objetivos slow food inauguró en 2003 la Academia Europea del Gusto una Universidad Gastronómica que forma profesionales con estos valores. Pero para quienes no puedan acceder a la formación europea, las propuestas locales tienen tintes de curiosidad y deleite. El convivum Norte de Buenos Aires desarrolla encuentros para todas las edades bajo el nombre laboratorio del gusto. Experiencias para sorprender el paladar que funcionan como testeos de nuevos y viejos sabores.

“El alimento es para nosotros un bien cultural” sostiene Barrera. Además explica que el foco de sus actividades es la incorporación de nuevos productos gastronómicos desconocidos en el mercado. “En general traemos un cocinero de la región de origen del producto para que cocine especialmente para nosotros en un buen lugar. De esa manera hemos puesto en el Hilton, por ejemplo, productos de consumo coya.”


La movida propone, a los artesanos de la comida de todo el mundo,presentar sus acciones en los Slow Food Awards, como una forma de revalorizar el respeto por la biodiversidad.


En 2002 la cooperativa jujeña Cauqueva, una organización que reúne a más de 140 productores indígenas, fue finalista del premio que se celebró en Turín.


Refiriéndose al caracol, el presidente de este movimiento Carlo Petrini dice que es el "emblema de la lentitud, este animal cosmopolita y prudente es un amuleto contra la velocidad, la exasperación, la distracción del hombre demasiado impaciente para sentir y gustar, ávido para recordar lo que recién ha terminado de devorar".

sábado, noviembre 17, 2007

Pomme d` e Ammour


A partir del descubrimiento de América (1492), papa, tomate, pimiento, girasol, calabaza, cacao y cierto tipo de alubias , su cultivo se extendió por Europa, si bien en forma no inmediata, sino a mediados del siglo XVI, es gracias a su fácil aclimatación en determinadas zonas.

Uno de los más controvertidos fué el tomate, del que desconfiaron los propios españoles que importaron sus semillas desde México. La mala fama de ésta solanácea traspasó las fronteras y en Francia se la consideró venenosa.

Sus flores se exhibían en las floristerías de París en pleno siglo XVII , tanto por su belleza exótica como por la curiosidad que despertaba. Asi se llegó a crear una singular leyenda en torno a los tomates, convertidos en afrodisíacos, capaz de enervar encendidas pasiones.

El "Pomme dé ammour" de los franceses, se llamó "Love Apple" en Inglaterra, y "Liebesapfel" en Alemania, llegando a ser poco decorosa que las mujeres se acercaran un tomate a los labios, al menos en público

Miel, antigua y moderna



Los embalsamadores egipcios, sabian que nada se estropeaba en miel pura.

Las colmenas repletas de abejas han sido empleadas incluso como armas arrojadas en combates medievales

Los cocineros atenienses de la Grecia antigua disfrutaban de numerosos privilegios entre ellos cierta impunidad si alguno de sus platos no gustaban a sus consumidores.
"Cuando el cocinero comete una falta el flautista recibe los golpes" rezaba un dicho de la época.

La repostería adquirió un desarrollo muy refinado como lo prueba esta receta:

"Amasar la harina en miel, extender la masa en forma de hoja delgada que el panadero pueda arrollar a su estilo y tendreis esos pasteles que son esquisitos cuando, aun calientes, pueden ser mojados en vino. Estos bollos tan dulces y ligeros, cocidos al horno con harina de sésamo, miel y leche, constituyen uno de los manjares de nuestra época".

domingo, noviembre 04, 2007

Banana, Platano, Cambur......


El platanero, tal como hoy se cultiva, es una creación artesanal debida al esfuerzo continuado por llegar a producir un fruto comestible y sabroso.

En la actualidad cosiderado como el de mayor consumo en el mundo.

En sus orígenes asiáticos, la planta tenía carácter simbólico y fué Buda quién lo comparó con la vanidad de los bienes terrenales.

Esta observación venía dada por la inutilidad de sus frutos -semillas amargas de las que no obtenía beneficio alguno- y de la efímera existencia de sus grandes hojas, que tras florecer morían irremediablemente.

La planta fué tratada por expertos agricultores chinos, que finalmente consiguieron un fruto comestible, delicado y aromático. Parece ser que fué Alejandro Magno, quién descubrió el platanero en India, aunque su traslado a Afríca, corrió a cargo de los mercaderes arábes.


En 1506, con ocasión de uno de los viajes de los descubridores españoles al Nuevo Mundo, el platanero fué embarcado de las islas Canarias rumbo a Santo Domingo-hoy República Dominicana-, donde arraigó el primer ejemplar, extendiéndose su culltivo por América central y Brasil con el paso del tiempo.

La denominación de banana, para referirse al fruto del platanero, procede de la ciudad congoleña de Puerto Banano, de donde fueron importados los primeros plátanos a Europa.

Es importante aclarar que las bananas son consumidas crudas como fruta de postre, y los plátanos, que por su superior contenido en fécula deben asarse o freírse antes de su ingesta. No se puede determinar si una planta producirá plátanos o bananas simplemente por su constitución genética.

En Argentina lo conocemos como Banana